Ansiedad crónica: Cuando la preocupación se vuelve parte de la vida diaria

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Ansiedad crónica
Ansiedad crónica

La ansiedad crónica hace referencia a un estado de preocupación o nerviosismo persistente y prolongado en el tiempo. Suele ser excesiva e incontrolable que. A diferencia de la ansiedad ocasional (una respuesta normal ante situaciones estresantes), la ansiedad crónica no desaparece fácilmente, pese a que no exista un peligro aparente, y puede interferir con el funcionamiento diario, repercutiendo física, emocional y cognitivamente.

A continuación, se abordará qué es la ansiedad crónica, sus señales, consecuencias y tratamientos para sobrellevarla.

¿Qué es la ansiedad crónica?

Según la American Psychological Association (APA) la ansiedad crónica se refiere a la experiencia persistente de ansiedad, que puede manifestarse como preocupación excesiva, miedo o inquietud.

Suele hacer referencia a un síntoma de un trastorno de ansiedad, como el trastorno de ansiedad generalizada, o puede ser una respuesta ante situaciones estresantes crónicas. De modo que esta condición psicológica puede llegar a interferir significativamente con la vida diaria, la función social y laboral. 

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Señales de ansiedad crónica

La persona manifiesta una serie de síntomas físicos, cognitivos y emocionales que se prolongan durante meses, y en casos graves, se vuelven incapacitantes.

Cabe recalcar que en cuanto a los síntomas físicos, las personas con ansiedad crónica suelen experimentar cierto temor por la susceptibilidad de confundirla con enfermedades.

Entre los síntomas físicos más frecuentes se encuentran:

  • Palpitaciones o taquicardia.
  • Sensación de falta de aire o hiperventilación.
  • Tensión muscular.
  • Dolor en el pecho y la cabeza.
  • Mareos o sensación de inestabilidad.
  • Trastornos gastrointestinales (náuseas, diarrea, colon irritable).
  • Sudoración excesiva.
  • Hormigueos o sensación de entumecimiento.

Entre los síntomas cognitivos de la ansiedad crónica:

  • Pensamientos negativos y repetitivos.
  • Preocupación constante y excesiva.
  • Expectativas catastróficas.
  • Problemas de concentración.
  • Problemas de sueño.
  • Constante estado de alerta.

Entre los síntomas emocionales de la ansiedad crónica:

  • Irritabilidad.
  • Cambios en el estado de ánimo.
  • Sentimientos de miedo o pánico sin razón aparente.
  • Dificultad para relajarse o calmarse.
  • Sensación de descontrol y estar al límite.
  • Evitación de situaciones que desencadenen ansiedad.

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Consecuencias de la ansiedad prolongada

Estudios han demostrado que existe una asociación entre la ansiedad crónica, estrés y enfermedades cardiovasculares, trastornos digestivos, alteraciones inmunológicas e incluso deterioro cognitivo. (Mariotti, 2015).

Además, puede generar comportamientos evitativos, aislamiento social, depresión y uso problemático de sustancias como el alcohol o medicamentos ansiolíticos. Asimismo, el desempeño en áreas laborales y académicas se ve afectado.

Trastornos que suelen presentar ansiedad crónica

La ansiedad crónica suele estar presente en los siguientes trastornos:  

  • Trastorno de ansiedad generalizada (TAG): Preocupación y ansiedad excesiva e incontrolable sobre múltiples áreas de la vida (salud, trabajo, relaciones).
  • Trastorno de pánico: Presencia recurrente de ataques de pánico inesperados, seguidos de preocupación persistente por su recurrencia o consecuencias.
  • Trastorno de ansiedad social: Preocupación duradera por el juicio ajeno, con evitación constante de situaciones sociales.
  • Trastorno de estrés postraumático (TEPT): Ansiedad crónica relacionada con hipervigilancia, recuerdos intrusivos o evitación después de experimentar o presenciar un evento traumático.
  • Trastorno evitativo de la personalidad: Ansiedad crónica relacionada con el rechazo y la desaprobación, donde las personas evitan relaciones sociales por hipersensibilidad al juicio.
  • Trastorno esquizotípico de la personalidad: Presenta ansiedad social intensa, incluso con personas conocidas y suele coexistir con creencias extrañas o pensamiento mágico.
  • Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC): La ansiedad crónica es provocada por obsesiones recurrentes. Aunque los rituales alivian momentáneamente el malestar, la ansiedad suele ser persistente.

Tratamiento para la ansiedad persistente

La ansiedad crónica debe ser evaluada por un profesional de la salud mental, que descarte otras condiciones médicas y evalúe su intensidad, duración e impacto funcional.

Algunas intervenciones incluyen:

  • Terapia cognitivo-conductual (TCC): Permite identificar y modificar los patrones de pensamiento negativo, y desarrollar estrategias de afrontamiento.
  • Técnicas de relajación y mindfulness: Reducen la activación fisiológica y mejoran la conciencia corporal. Técnicas como la respiración profunda, la meditación y yoga resultan útiles.
  • Estilo de vida saludable: Mantener una dieta equilibrada, ejercicio regular y hábitos de sueño apropiados, ayuda a bajar los niveles de ansiedad.
  • Redes de apoyo: El apoyo social siempre es esencial para facilitar la expresión y el hecho de compartir lo que se experimenta con la ansiedad crónica.
  • Medicamentos ansiolíticos o antidepresivos: En ciertos casos, resulta necesario el tratamiento combinado.
  • Psicoeducación: Comprender los efectos de la ansiedad normal y la ansiedad crónica, permite mayor aceptación y disminuye el miedo a los síntomas físicos.

Asimismo, Pedro Moreno propone centrarse en explorar las «trampas mentales» que perpetúan la ansiedad crónica, observando las reacciones ante los propios pensamientos y cómo estas reacciones pueden intensificar el malestar emocional.

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Conclusiones

La ansiedad crónica es un estado de preocupación y nerviosismo persistente y prolongado, que pese a generar efectos negativos en la salud, es algo absolutamente tratable.

Los síntomas físicos de la ansiedad no siempre son signos de una enfermedad orgánica, sin embargo, es importante reconocerlos desde su origen de ansiedad crónica, para salir del círculo de preocupación constante.

La intervención es crucial para reducir el malestar y dejar de “normalizarlo” como algo intrascendente. La ansiedad puede ser una respuesta normal, sin embargo, cuando es crónica, no debe pasar desapercibida. Tratarla es importante y da lugar a una mejor calidad de vida.

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Preguntas frecuentes

  • ¿Qué es la ansiedad crónica?
    Es un estado de ansiedad persistente y generalizada que se mantiene durante un tiempo prolongado. Suele ir acompañada de síntomas físicos, pensamientos negativos repetitivos y dificultad para relajarse.
  • ¿La ansiedad crónica puede afectar mi salud física?
    Sí. Aunque la ansiedad no causa daño físico directo, puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares, trastornos digestivos, fatiga crónica y afectar el sistema inmunológico si no se trata a tiempo.
  • ¿Cómo saber si tengo ansiedad crónica o solo estoy estresado?
    El estrés suele ser una respuesta temporal ante una situación concreta, mientras que la ansiedad crónica persiste incluso sin un motivo claro, interfiriendo con tu vida diaria.

Referencias

BBC Mundo. (2014, 24 de abril). ¿Cómo funciona la ansiedad crónica? BBC News Mundo. Recuperado el 22 de abril de 2025.

Mariotti, A. (2015). Los efectos del estrés crónico en la salud: nuevos conocimientos sobre los mecanismos moleculares de la comunicación cerebro-cuerpo. Futuro Sci OA. 1(3):FSO23. doi: 10.4155/fso.15.21. PMID: 28031896; PMCID: PMC5137920.

Moreno, P. (2020). Ansiedad crónica. Una guía para pacientes e impacientes. Editorial Desclée de Brouwer, S.A.

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Juliana Urioste Sotomayor
Licenciada en psicología, con diplomado en psicología clínica y maestría en Psicoterapia con EMDR en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED). Matrícula Profesional U-10336407. Con experiencia en trastornos de estrés y trauma, esencialmente diagnóstico de Trastorno de Estrés Postraumático y disociación, así como experiencias adversas infantiles, desde el enfoque integrativo. Manejo de la intervención en población adulta e infanto-juvenil, a partir de una mirada integradora, encaminada al desarrollo de habilidades y comprensión interna. Actualmente incluida en el equipo de apoyo para la formación como facilitadora y supervisora del Entrenamiento Oficial de EMDR América Latina.
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